
De aquel mismo junio, mismo día, pero de otro Jirón- mucho mas conocido- lleno de muchedumbre, este a diferencia del otro carente de espacios vacios.

Se recuerda con tristeza, esas calles que siempre terminan en Quilca
en el puesto del gato escuchando a Stan Getz
No hay comentarios:
Publicar un comentario